PRIMERA COMUNIÓN

   Esta fotografía fue tomada el 24 de noviembre de 1940 en la Escuela N° 33 del paraje La Rosada, establecimiento que funcionó desde el 1° de julio de 1926 hasta el 26 de marzo de 1978, fecha en que fue clausurado por una notable disminución de alumnos a causa del fenómeno migratorio de los colonos y propietarios hacia la ciudad. Durante muchos años, la familia Castro Vélez Sarsfield cedió un importante sector de sus extensos campos pertenecientes a la estancia La Esperanza, junto a la ruta 191, para posibilitar el funcionamiento de esta escuela rural, que proporcionó el adecuado marco a reiterados acontecimientos tan significativos para la importante y numerosa comunidad agrícola que la rodeaba, como el que registra esta antigua fotografía. Muchos de los que posaron para ella ya no están, pero sus nombres quedaron grabados en la perdurable memoria del afecto.
  
    De izquierda a derecha, de pie, última fila, Sergio Llul, Guillermo Baca, Héctor Jiménez, Rolando Tettamanti, Eduardo Vázquez, Valentín Colantono, Horacio Domeniconi, Venerando Pérez, Aníbal Brambilla, Ludovico Brambilla; en un plano superior, Horacio Baca y Ramón Llul; de pie, segunda fila, la docente  de primero y segundo grado señora Isabel Birador de Calonge, Ernesto Vagni, Américo Sánchez, padre Santino Brunelli, director del Instituto Margarita O’Farrell de Maguire de Santa Lucía, Alfi Giani, Héctor Vázquez, señora Cecilia Basaldúa de Garmendia, directora de la Escuela N° 33 a cargo de los grados tercero y cuarto, y Josefina Antoniali, reconocida modista de la zona que confeccionó esmeradamente los vestidos que lucieron las niñas en esta ceremonia; tercera fila, niñas sentadas, Elena Llul, Otilia Biaín, María Montes, Ursulina Artero, Elba Giani, Victoria Peral, Cecilia Sánchez, Delia Ferraro, Dora Rivas, Elena Navarro; sentadas en el suelo, Etelvina Vázquez, María Navarro, Marta Peral y Marta Baca.

    Fueron vestidas y acondicionadas en esa oportunidad por la citada modista en la casa de Regina Marelli, quien obsequió las flores para el decorado, esposa de Juan Tettamanti (Rocho), el herrero del barrio, ubicado con su taller frente a la Escuela, en el sector de tierras también facilitadas por los dueños de La Esperanza, quienes permitieron además levantar en ellas el almacén, con su casa habitación, y el club social con su salón y su cancha de fútbol. Viejas épocas de La Rosada, inolvidable foco centralizador donde los pobladores de la zona lograron establecer lazos de amistad firme y solidaria... Viejas épocas que son hoy entrañables recuerdos.  
Colaboración: Julia McInerny

Fuente: Señora Etelvina Vázquez de Armendáriz: Identificación de los fotografiados. 

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