CLUB CICLISTA

Club Ciclista, impulsor del Estadio Municipal

El ciclismo es una de las actividades deportivas que caló hondo desde comienzos del siglo XX en la juventud local, que se dedicó de lleno a la práctica de este deporte. Tuvo además el empuje necesario como para encarar desde el inicio mismo, la formación de un club, siendo el primero en constituirse en nuestra ciudad, encarando luego la construcción de un espacio apropiado para ser utilizado por los ciclistas en sus competencias en pistas.
El antecedente más remoto de esta actividad lo encontramos en el año 1903 en que se organiza el Centro Unión Ciclista” entre los aficionados a dicho deporte, que se impusieron como mira la construcción de un velódromo recreativo para su práctica.
Ello hizo que se movilizara la juventud detrás de un interesante proyecto, que culminaría a posteriori con la construcción del Estadio Municipal, donde construyeron en dicho terreno el primer velódromo de San Pedro. 
Con la idea puesta en ese proyecto en 1928 iniciaron gestiones para que el Municipio adquiriera un terreno propiedad de Eduardo González Bonorino sobre la calle Mitre, atento a que ya había más de 500 ciclistas.
Al respecto en el periódico La Palabra del 11 de noviembre de 1928, aparece un escrito firmado con el seudónimo “De Media Carrera”, donde dice: que últimamente se han venido publicando comentarios sobre el tema vinculado al ciclismo “para animar e indicar a la Intendencia la conveniencia de llegar a un acuerdo con el Sr. Bonorino, dueño de dos manzanas de terreno frente a la herrería Solmi,  bien situado sobre pavimentación, terreno que el Club Ciclista desea lo adquiera la Intendencia para construir una plaza de deportes y pistas de bicicletas y patinaje”.
 El firmante del artículo mencionaba que un legislador que ocupaba un alto lugar en la Comisión de Presupuesto, se proponía incluir en el mismo para el año 1929, una suma elevada para que el gobierno provincial pudiera construir en el lugar mencionado un estadio deportivo regional, con miras a tener una pista para los más de 500 ciclistas que tenía el Cicles Club San Pedro.
“Esperemos –finalizaba el escrito de «De Media Carrera»– que esa idea tapada se haga y entonces tendremos también nosotros algo”.
Estos comentarios se hacían en el preciso momento en que el club nombrado terminaba de adherirse a la Federación Ciclista Buenos Aires, lo que significaba para las pruebas futuras de ciclistas, la incorporación de valores técnicos altos. “Este esfuerzo vendrá a mejorar los equipos locales del pedal –decía el periodista–, pues siempre tendrán ocasión de medirse con ciclistas de los grandes clubes porteños y rosarinos que intervendrán por la referida federación”.
El éxito obtenido en la gestión significaba para los gestores el comienzo de un gran triunfo, al observar como la juventud local abandonaba  “las canchas de taba, los despachos de bebida y las carpetas de juego por los fiel deportivos, por el ciclismo, el remo y la natación” ( La Palabra 28-10-1928 ), razón excluyente por la cual invocaban tener el derecho a ese espacio que finalmente usufructuaron para el uso de sus competencias deportivas; aunque por muy poco tiempo pudieron disfrutar de él, porque una decisión municipal hizo que el mismo fuera utilizado para los encuentros futbolísticos.
No obstante ello el ciclismo siguió desarrollándose con un entusiasmo tal que permitió el surgimiento de algunos deportistas tales como Athos Barbieri y A. Villa. El primero se destacó como un gran velocista imponiéndose con creciente eficiencia en pruebas realizadas tanto en nuestro partido como en ciudades vecinas, venciendo precisamente el 20 de agosto de 1944 en la ciudad de Zárate, de la que resultó segundo el zarateño R. Gelpe.
El segundo cumplió una importante campaña dentro del ciclismo local y zonal, cuya institución madre se fue perdiendo con el correr de los años.
Creo que quienes iniciaron una reactivación desarrollando la Comisión Pro-Ciclismo San Pedro, entre quienes figuran Roberto Márquez y Bilbao, seguramente ignoraron toda la trayectoria que ha tenido la afición ciclística de nuestra ciudad, que inició su actividad antes de que se declarara ciudad a nuestro pueblo, como inauguradora de la actividad deportiva. Resulta eso sí interesante el hecho de que se haya pensado en los menores para despertar nuevamente el entusiasmo por una actividad que solo necesita una pequeña orientación para que ella se convierta en un éxito total.

Fuente: Historia Documental de San Pedro Américo Piccagli

Comentarios

Entradas populares de este blog

EL CALIBRE DE LAS ESCOPETAS

BREVE HISTORIA DE SAN PEDRO Bs.As.

RÍOS Y ARROYOS DE SAN PEDRO